225 veces Cubero

Vélez regresó esta mañana a los trabajos en Ituzaingó, donde suena con mayor firmeza el pedido del artículo 225 que habilita al suspendido Cubero para el encuentro final ante Huracán, ya que Ponce continúa diferenciado y es poco probable que llegue.

Buenos Aires, Martes 23 de junio de 2009.
(Prensa Vélez Sarsfield – Villa Olímpica).

El plantel de Vélez Sarsfield regresó a los entrenamientos esta mañana en el predio de Parque Leloir, encarando lo que sin dudas será una semana especial sin fútbol aguardando la importante final que le depara este Torneo Clausura, cuando reciba el domingo 5 de julio a Huracán en el estadio José Amalfitani.

Más allá de la lejanía con el encuentro, en Vélez no se hace otra cosa que pensar en ese gran choque, por eso se piensa en el equipo que saldrá en busca de una nueva coronación para la institución.

Es que por eso suena tan fuerte la chance de que el suspendido Fabián Cubero esté entre los once titulares que saldrán al campo de juego del Amalfitani para defender la ilusión; más allá de haber sido expulsado (injustamente) el pasado domingo en el encuentro ante Lanús. ¿Cómo es esto? Waldo Ponce permanece trabajando diferenciado y con dolor en su rodilla derecha, lugar de la lesión con la que regresó de los encuentros que disputó hace unas semanas con su seleccionado de Chile. Esta dolencia hace que el defensor no trabaje con normalidad y allí existe la chance de hacer oficial el pedido del famoso artículo 225 que habilite a Cubero para el último compromiso del Fortín en el Clausura. De todas formas, Ponce deberá ser evaluado el miércoles de la próxima semana por los médicos de la Asociación del Fútbol Argentino para constatar la lesión y una vez confirmada se procederá a la habilitación del Poroto.

Lo que más preocupa es que el fuerte golpe sufrido por Ponce en su rodilla derecha le ha impedido trabajar con normalidad, aún no ha trotado siquiera lo que le resta condiciones para ponerse bien desde el punto de vista físico (aún no cuenta con el alta médica), y por entonces futbolístico. Por esto, son positivos los pensamientos del cuerpo técnico de poder contar con Fabián Cubero en cancha para el partido más importante de Vélez en los últimos años.

En otro orden, Jonathan Cristaldo estuvo presente esta mañana en el predio de Ituzaingó realizando algunas evaluaciones de su lesión del menisco interno de la rodilla derecha; como así también, ultimando detalles para la intervención quirúrgica que se le realizará mañana jueves.

Por otra parte, Gastón Díaz se entrenó diferenciado pero sin mayores riesgos luego del mal trago sufrido en la tarde noche de ayer, cuando tuvo un accidente con su vehículo en la vía pública. El defensor sólo presentó algunos daños físicos en su mano derecha, mientras que su móvil quedó devastado por el impacto. Se espera que mañana miércoles, Díaz se sume al resto de sus compañeros en los trabajos designados por el cuerpo técnico. Quien también trabajó diferenciado pero solamente para bajar cargas fue Maximiliano Moralez.

Esta mañana, los trabajos comenzaron cerca de las 10, cuando el plantel saltó al campo de juego para realizar trabajos de entrada en calor. Luego, se dividió en dos grandes gurpos. Mientras uno compuesto por Titulares trabajó de manera regenerativa; el otro de Suplentes, se midió en fútbol reducido para equiparar los niveles de desgaste y exigencia, como también el ritmo futbolístico.

Vélez Sarsfield regresará mañana por la mañana a los entrenamientos en Parque Leloir, desde donde en horas de la tarde partirá la delegación rumbo a Misiones para disputar el Triangular este jueves, junto a Guaraní Antonio Franco y el Club Bartolomé Mitre de Posadas.