Ricardo Álvarez sigue remarcando que más allá de la derrota todavía no hubo equipo en el Clausura que haya superado a este conjunto con juveniles de Vélez. Además, mostró un sabor agridulce por su debut en la red. “Tengo sentimientos encontrados", dijo.
Con su juego desfachatado. En su suela insolente se esconden los secretos de su juego picante y escurridizo con el balón. De a poco va sabiendo cómo ganarse el asombro y el deslumbramiento del hincha de Vélez. Más, con este bautismo de gol que recibió en nada más ni nada menos que el Monumental.
En Ricardo Álvarez se encierra el paradigma del jugador talentoso que a base de gambetas y jugarretas con el balón, irrumpe en la primera división y se va consolidando paso a paso. Postergado en un momento por las lesiones, hoy busca definitivamente su chance y la aprovecha al máximo. Por lo menos, ya pegó su primer grito grande en la red.
“Tengo sentimientos encontrados. Por un lado, la alegría enrome de hacer un gol acá, en esta cancha; pero te queda el sabor de la derrota. Vinimos a ganar, a conseguir esos tres puntos que nos acerquen a la Copa Sudamericana. No se pudo dar pero esto sigue”, remarcó la Joyita.
Clarito le pibe, sabe lo que además se juega este Vélez de cara a su sueño copero en el año centenario y deja bien en claro también para dónde apunta la mira velezana. “Ahora el martes tenemos una revancha muy importante que tenemos que dejar todo para pasar de ronda en la Libertadores”, agregó.
-Es que realmente los complicó poco River después de tu gol…
-Tuvimos diez minutos después del gol en los que tuvimos muchas situaciones claras. Después, la verdad es que no pudimos generar mucho fútbol nosotros y nos mató el gol que ellos nos hicieron al final del primer tiempo. Terminar el primer tiempo ganando hubiese sido muy bueno para nosotros para salir al segundo con otra mentalidad. Pero bueno, ya está, no se puede hacer nada.
A los ocho minutos de juego, recibió un pase perfecto del Bebu Velázquez y emprendió su corrida al vacío a la par de Alexis Ferrero. Cuando un desesperado Vega intentaba llegar al balón, este flaco y talentoso volante estiró la punta de su botín izquierdo y madrugó a todos para poner el grito bien alto de su debut goleador en primera. Una alegría que derivó en una mezcla de sensaciones con la derrota del final. “Esta cancha es la más importante del fútbol argentino y hacer un gol acá, es una alegría enorme. No puedo disfrutarlo del todo porque perdimos y nos aleja un poco de las copas. Hay que seguir luchando que falta poquito”, apuntó Álvarez.
-Hoy quedó demostrado, más allá de la derrota, lo que dijiste en la semana que ninguno lo pasó por arriba a este equipo juvenil…
-Eso me deja bien tranquilo. Este plantel me llena de orgullo porque nos paramos a jugar igual en cualquier cancha y de igual a igual a cualquiera.
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Hace 2 años
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