"Vélez está dulce"

La dupla de ataque top del Apertura saborea la cima con Olé. ¿Su fórmula? "En la cancha le perdemos el respeto a cualquiera".

No son Batman y Robin. Tampoco Starsky y Hutch. Ni Don Quijote y Sancho Panza. Y, aunque tiene que ver más con su forma de ser (y de jugar), tampoco son los Hermanos Macana. Son Juan Manuel Martínez y Maximiliano Moralez, una dupla que, con sus gambetas y firuletes, ya se consolidó como la sociedad más peligrosa del fútbol argentino. "Nos divertimos, pero no sólo nosotros: todo el equipo lo disfruta. El plantel está a gusto y las cosas nos salen. Entonces, aparte de jugar bien, lo podemos disfrutar. Nos divertimos mucho adentro de la cancha", abre el juego con Olé el Burrito.
-Se entienden como pocos con la pelotita...
MM: Jugar al lado de tipos como Juanma te hace todo más fácil. Tenemos las mismas características y sabemos que podemos desequilibrar. Pero también lo hacemos porque todo el equipo está sólido. En Vélez hay muy buen pie: a cualquiera que se la des, te la devuelve redonda.
JMM: Esto es algo que ya se viene formando desde el torneo pasado y ahora que tengo más minutos en cancha con él, nos conocemos y estudiamos más esa relación que tenemos. Nos sentimos muy cómodos y tenemos ideas de juego similares: jugamos los dos con el arco de enfrente entre ceja y ceja.
-Igual, da la sensación de que se buscan constantemente uno con el otro.
JMM: Sí, siempre tratamos de buscarnos porque sabemos que los dos juntos complicamos al equipo rival. Pero también buscamos al Tanque (Silva) o a los que llegan, como Augusto o Papa.
MM: Sabemos que de mitad de cancha para adelante somos importantes y tratamos de tomarlo así. Nos buscamos mutuamente porque sabemos que podemos lastimar y hacer ganar al equipo.
-¿Les gusta el rótulo de ser los mejores jugadores o la mejor dupla del fútbol argentino?
JMM: En las primeras tres fechas sí fuimos la sociedad que mejor se entendió, por el tiempo que llevamos juntos. Es lindo que digan porque, sea cierto o no, significa que, si no sos el mejor, estás entre los mejores. Así que da felicidad que te tengan tan bien considerado. Lo importante es mantener el elogio.
MM: Cada equipo tendrá sus jugadores y se fijará en lo suyo. No sé. A mí lo único que me importa es ayudar a que gane Vélez.
-¿Ganaron jugando bien y también jugando mal?
MM: En las dos primeras fechas fuimos muy superiores y en la última se ganó igual, sin jugar de la mejor manera. Estamos dulces, en una buena racha, y demostramos que podemos tener un partido malo y ganar.
JMM: Sí, estamos dulces. En un gran momento. Lo importante es que cuando no se juega tan bien, como el otro día, también se puede ganar. Hay equipos que juegan mal y no ganan, así que lo nuestro es muy meritorio.
-¿Y cuál es la clave?
MM: Que en cualquier cancha donde jugamos vamos con la idea de perderle el respeto al rival. Si es en su cancha les vamos a faltar el respeto para ganarles y, si es en la nuestra, no vamos a dejar que nos lo falten a nosotros. Es así.
JMM: La gente sabe cómo juega Vélez, así que no hay ningún secreto. Obviamente que el respeto está, pero a la hora de entrar a la cancha no nos importa quién está adelante y sólo queremos ganar y jugar bien. Si tenemos que trabar, trabamos; y si tenemos que tirar un caño, lo tiramos. Nosotros jugamos de esa manera. No nos importa en qué cancha juguemos, queremos ganar, aunque sin sobrar al rival.
-Pero no es lo mismo tirar un caño en la Bombonera, y encima llena, que en otra cancha...
JMM: Depende de cada uno... El campo de juego es más grande o más chico, pero nada más. Para mí es lo mismo tirarlo en la cancha de Boca, que en la de Vélez, la de River o la de Lanús. Después, si uno se deja presionar por el estadio y el contexto... Para mí es lo mismo. Es más, cuanta más gente haya, mejor. Porque uno se motiva más. Por eso jugar en cancha de Boca es una de las cosas más lindas que hay.
-¿Los sorprendió el mal arranque de Boca?
MM: No, si arrancó así, por algo será. Es lo que pasa cuando traés varios jugadores nuevos. Van a tardar en acomodarse, es lógico.
JMM: A mí sí, porque se reforzó bien y trajo al último técnico campeón, que demostró que es muy capaz. Pero no nos podemos dejar llevar por eso. No lo podemos subestirmar porque es uno de los mejores de Argentina y del Mundo, entonces tenemos que estar a la altura de las circunstancias y jugar como si fuese una final.
-Borghi dijo que si perdía con Vélez se podía ir, ¿influye en ustedes esto?
JMM: No, lo que nosotros vamos a hacer el domingo es entrar a la cancha y dejar la vida para traernos los tres puntos y seguir en la punta. Después, lo que haga o deje de hacer Boca, es problema de Boca.
MM: No, eso está en cada uno. Yo juego para Vélez y quiero que el equipo gane y esté arriba. Voy a tratar de hacer mi juego porque yo quiero ganar siempre.
-Se habló mucho de las difíciles primeras seis fechas. Ya ganaron tres, ¿ahora van por Boca, River y San Lorenzo?
JMM: Sería hermoso ganar esos tres partidos. Son complicados, pero no pensamos tanto en el futuro sino en Boca. Estamos tranquilos y con los pies sobre la tierra porque todavía no conseguimos nada.
MM: Si queremos pelear el campeonato, hay que ganarles a todos. Primero a Boca y después al resto. Siempre tenemos que tratar de superarnos.
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Fuente: Diario Olé.-