“LE PUDE DAR ALEGRÍA A LOS HINCHAS”

Tenerlo siempre en casa es un gusto. Desde que la vida le dio uno de los golpes más duros que un jugador pueda recibir, el Fortín siempre estuvo con él, acompañándolo de la mano, dándole aire; y por sobre todas las cosas, un lugar. Ese lugar que supo ganarse con esa rapidez característica y con esa visión del terreno de juego como sólo él sabía explotar. Un lugar en el alma de todos los fortineros desde el mismo instante en que con tan sólo un puñado de años sacaba pecho y se convertía en campeón argentino luciendo la V azul. Ese lugar que es definitivamente suyo y por el cual el Departamento de Prensa del Club Atlético Vélez Sarsfield lo quiso homenajear. Nada mejor que esta preciosa serie de “Mano a Mano” organizado por el Sitio Oficial para tenerlo. Nunca un mejor contexto como el lujoso Salón Vip de Prensa del Tercer piso de la Sede para acunarlo. Imposible imaginar entrevistadores que no sean los propios hinchas. Todo y todos acordes esperando a uno de los grandes ídolos de Vélez, el Indiecito Marcelo René Bravo.Por eso, con esas dosis de adrenalina pura de tener a esa figura con la que se deleitaron en tantos encuentros dentro de un campo de juego; Leandro Cafaro, Leonardo Rocha y Juan Rosello, jugaron a ser periodistas sin abandonar su rol precioso de hinchas para robarle al Chelo partes, anécdotas, perlas preciosa de su carrera futbolística y esta actual como entrenador de las divisiones infantiles del club.Con la simpleza y humildad que dan una fiel imagen de Bravo, la charla dio inicio y de a poco se fueron desnudando historias de los comienzos del jugador, con esa picardía intacta de su juventud.El volante de Vélez comenzó comentando sus inicios en el baby fútbol, como en aquellas tardes en las que correteaba detrás del balón ante defensores gigantes para su altura; donde él se las ingeniaba por ejemplo, para anotar los 13 goles con los que su equipo ganara un partido. Aquellos primeros pasos en Vélez, en ese torneo infantil en donde estuvo a prueba y obligó a su técnico a no sacarlo más. Pasando por la actualidad y observar las chances actuales de su Vélez; del reflejo que ve en Iván Bella de su juego; de su trabajo en infantiles; de su corta pero inmensa carrera que hoy se extiende como entrenador.Sobre el final de la charla, quedaron las anécdotas relacionadas con Marcelo Bielsa, en la época en que Bravo era sparring de la Selección Nacional de Fútbol Argentino. Historias que arrancaron más de una sonrisa y que además de hacer una gran radiografía de la persona de bien del actual Seleccionador Chileno, representaron la grandeza futbolística de este pibe que le arrancó deseos de selección mayor al Loco.

Para Leonardo fue “espectacular el Mano a Mano entrevistando a un campeón de Vélez”. A su vez, el joven de Colegiales agregó que “me pareció que es un muchacho que tiene las cosas muy bien claras”. Y se despidió agradeciendo la experiencia vivida junto al Chelo.Por su parte, Leandro de Versailles señaló que “los hinchas de Vélez siempre le vamos a estar agradecidos a Marcelo”; sumando a su agradecimiento al Departamento de Prensa.“Me pareció una persona increíble”, dijo Juan de Flores; al mismo tiempo destacó la “grandeza” de Marcelo.“Estoy muy contento porque le pude dar alegría a los hinchas que a veces no pueden estar con los jugadores”, remarcó Marcelo Bravo en su comentario inicial sobre las sensaciones que le dejó el Mano a Mano.“Me parece una excelente idea y más que nada que la pasemos bien”, remarcó muy agradecido el ex volante del Fortín; a la vez que respondió al interrogante clásico de esta gala sobre la facilidad de enfrentar a los periodistas o a los hinchas, a lo que señaló “Es más fácil enfrentarlos a ellos (por los hinchas) mil veces porque uno está tranquilos y les podés contar cosas vividas que a muy pocos se las contás”. Los cuatro socios ganadores se fueron muy agradecidos con el jugador, la Institución, y con sus camisetas oficiales del exquisito volante zurdo, con indumentaria que otorgó la gente de PENALTY como gorros y pelotas; más obsequios de Vélez que se les facilitó al finalizar el encuentro. Un Mano a Mano que superó en expectativa a todos. Un encuentro con el Indiecito en casa, que se extendió mucho más de la charla, compartiendo el habitual lunch de agasajo para el ídolo y los ganadores de la preciosa chance de entrevistarlo.Así se cerró otro momento fantástico de esta serie de Mano a Mano que ya son un clásico de nuestro Departamento de Prensa, con el deseo de cada protagonista de estar siempre en casa. La casa que le mantiene fuerte el abrazo a Marcelito Bravo.-

Carlos Alberto Martino.